Concluyen los Días de Acción Global sobre Gasto Militar (GDAMS) con más de un centenar de acciones en todo el mundo

La 12ª edición de los Días de Acción Global sobre Gasto Militar (GDAMS por sus siglas en inglés), una iniciativa del International Peace Bureau que coordina el Centre Delàs d’Estudis per la Pau desde Barcelona, finalizó el pasado 9 de mayo, después de casi 4 semanas de acciones que unieron a organizaciones de todo el mundo para pedir drásticos recortes de los gastos militares en un contexto de crecientes tensiones y conflictividad y de crisis climática.

El gasto militar mundial alcanzó los 2,24 billones de dólares en 2022, una cifra que crece por octavo año consecutivo, en el primer año de guerra en Ucrania desde la invasión rusa, mientras que Europa registra su mayor aumento desde la Guerra Fría, un 13%. Para protestar ante estas cifras, la campaña organizó este período de acciones, que comenzó el 13 de abril, con el foco en el Tax Day en Estados Unidos, día en que se recaudan los impuestos a la mayor potencia militar del mundo. Sin embargo, la fecha más señalada de los GDAMS fue el 24 de abril, día en que el Instituto Internacional de Investigación por la Paz de Stockholm (SIPRI) hizo públicos los datos de gasto militar mundial para el año 2022. Coincidiendo con ello, la campaña organizó ruedas de prensa de Seúl, Berlín, Roma y Barcelona, lanzó infografías para desgranar estos nuevos datos y coordinó acciones online para poner la atención sobre el gasto militar, con docenas de organizaciones utilizando el hashtag #WarCostsUSTheEarth. Para concluir los GDAMS, se prepararon acciones para el 9 de mayo, Día de Europa de la Paz, para protestar por la creciente militarización del continente europeo, en colaboración con ENAAT y TNI, con quienes se realizaron infografías específicas.

Durante el período de los GDAMS se realizaron más de 100 acciones en 25 países diferentes. Por otra parte, más de 120 organizaciones de todo el mundo firmaron el llamamiento de la campaña, pidiendo recortes del gasto militar a los gobiernos de todo el mundo y que, en su lugar, dediquen esfuerzos a mitigar y revertir el colapso climático , y en promover la transformación pacífica de los conflictos, el desarme y las iniciativas de justicia global.