“Trabajar por la paz es el único camino que nos llevará a más seguridad”, el Centro Delàs comparece en el Parlament de Catalunya

Este jueves 18 de julio, Jordi Calvo, coordinador e investigador del Centro Delàs ha comparecido en una sesión de la Comisión de Acción Exterior, Relaciones Institucionales y Transparencia del Parlament de Catalunya, donde el Centro fue invitado a presentar su trabajo y los principales análisis que lleva a cabo en el marco de la lucha por un mundo desarmado y desmilitarizado.

La comparecencia empezó con un recorrido desde los inicios del Centro Delàs hasta la actualidad, haciendo una mirada a 20 años de trabajo por la paz, el desarme y la desmilitarización. Se destacaron los diferentes recursos y publicaciones sobre las diferentes líneas de trabajo del Centro, así como su participación activa y liderazgo de algunas de las principales redes por la paz y el desarme a nivel local, estatal e internacional.

“Vivimos un momento histórico en el que, si no rectificamos, se darán todos los elementos necesarios previos a nuevos conflictos armados, represión, persecución de la disidencia, recortes en derechos y libertades, y violencia de estado, que pensábamos habíamos dejado atrás”, Jordi Calvo puso en contexto el aumento del impulso del armamentismo y el militarismo en el actual ideario imperante sobre seguridad y defensa en todo el mundo.

La comparecencia sirvió para reclamar el cumplimiento de las propuestas concretas de la Moción 55/XI del Parlamento de Cataluña de 13 de julio de 2016 sobre la desmilitarización de Cataluña. Entre estos compromisos se encuentra el de evitar la presencia del ejército en centros educativos y formativos así como en espacios educativos y promocionales o el de prohibir las maniobras militares en espacios civiles, como en los parques naturales catalanes.

En este sentido, Jordi Calvo dirigió una serie de demandas a los miembros de la Comisión de Acción Exterior, Relaciones Institucionales y Transparencia del Parlament de Catalunya, con el objetivo de contribuir a “desarmar y desmilitarizar las políticas de seguridad y defensa en Catalunya, en el Estado, Europa y a nivel global”:

– Contribuir a la reducción del gasto militar, puesto que es el inicio de todo ciclo armamentista y del negocio que éste comporta. En España el gasto militar real anual es actualmente de 20 mil millones de €, el 1,67% del PIB y el 4,4% del presupuesto total.

– Pedir la aplicación rigurosa y efectiva de la legislación existente sobre el control de las exportaciones de armas, la Ley española 53/2007, la Posición Común europea, y del Tratado sobre el Comercio de Armas de 2013, para evitar que la venta de armas españolas puedan contribuir a la guerra o a cualquier violencia. Y que desde Catalunya se propongan todavía más instrumentos para una interpretación más correcta de la legislación sobre exportación de armas, con la realización de informes sobre las exportaciones de armas españolas y europeas a países en conflicto armado, donde se vulneren los derechos humanos.

– Saber exactamente qué armamento se fabrica en Catalunya y dónde es vendido.  Además de la elaboración de un análisis riguroso de las rutas de las armas que vienen de todo el Estado, que son embarcadas en puertos  catalanes rumbo a regímenes dictatoriales y guerras.

– Andar hacia la reducción de los ejércitos y reconducir estos recursos a ayudarnos verdaderamente a hacer frente a las amenazas a nuestra seguridad.

– Apostar por unas relaciones exteriores basadas en la Cooperación al Desarrollo, los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y todas las iniciativas existentes de paz, desarme y promoción de los derechos humanos en la comunidad internacional.

– Declarar y promover todos los procesos de desarme existentes. Entre otros, el Tratado de Prohibición de las Armas Nucleares, el proceso de prohibición de los robots militares o la reducción del gasto militar.

– Trabajar el rol de la UE en materia de seguridad y defensa, y rechazar las políticas de promoción de la industria armamentista y de seguridad e impulso del comercio de armas, las políticas de militarización y externalización de fronteras.

“Trabajar por la paz es el único camino que nos llevará más seguridad”, ha concluido Jordi Calvo, apelando a la responsabilidad del gobierno, instituciones y partidos, de contribuir con su trabajo a construir un mundo mejor.

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